El sobrepeso era una solución inconsciente en la que Sofía gestionaba su pérdida. Sobrepeso: llevo mis pérdidas muy cerca de mí.
Sofía es una mujer de 35 años y con sobrepeso. Le encanta hacer ejercicio; corre y suele ir al gimnasio. Sin embargo, por más que se esfuerza, no logra bajar de peso.
Al indagar por la génesis de su síntoma, la consultante me aclaró que a raíz de su primer embarazo, el cual se vio interrumpido con un aborto espontáneo, había empezado a aumentar de peso. Seis meses después, quedó nuevamente embarazada, pero se produjo igualmente el aborto a las pocas semanas de gestación. Con este nuevo evento, su peso aumentó aún más.
Estas experiencias fueron difíciles de asimilar para Sofía, ya que tanto ella como su marido deseaban tener un bebé. Sin embargo, tras las pérdidas sufridas, decidieron adoptar una perrita blanca que ahora cuidan con tanto amor. Su perrita llegó en un momento significativo, y según las palabras de Sofía, traía alegría a su casa; era como si “ocupara todo el espacio”… Mmm como su sobrepeso, pensé yo.
Constelación
La constelación permitió evidenciar que esos bebés, eran guardadas por Sofía de una forma muy íntima y cercana: en su sobrepeso. Era su manera de mantenerlos calienticos y protegidos.
El sobrepeso, claramente le estaba ayudando a la consultante a gestionar el dolor de esas pérdidas. Una vez se hizo esto consiente, se trabajó de la mano con la consultante en la manera de poner simbólicamente a sus bebés perdidos en otro lado, fuera de su propio cuerpo.
